Homegoing – Yaa Gyasi, 2016
Ida y regreso de generaciones unidas por la sangre y el sufrimiento hacia las personas racializadas. Cada historia, cada personaje te parte el alma y sin embargo, cuando toca dejarlx atrás y seguir con la siguiente no puedes dejar de preguntarte qué serían de ellxs antes y después. Una historia sobre las familias y los lazos.
«La noche que nació Effia Otcher, rodeada del calor almizclado de la tierra de los fante, un fuego hizo estragos en el bosque, junto a la casa de su padre. Avanzó deprisa y se abrió camino durante varios días. Vivía del aire, dormía en cuevas y se escondía en los árboles. Quemó todo aquello que encontraba, sin preocuparse por la devastación que dejaba a su paso, hasta llegar a una aldea asante. Allí desapareció y se fundió con la oscuridad.»
«<Quiérela>, le había ordenado Cobbe, como si el amor fuese un acto igual de sencillo que coger comido de un plato de hierro y llevársela a la boca.»
«El infierno era un lugar hecho de recuerdos donde hasta el último instante de belleza atravesaba el ojo de la mente para precipitarse luego al suelo como un mango podrido, perfectamente inútil, inútilmente perfecto.»
«¿Quieres saber lo que es la debilidad? Ser débil es tratar a los demás como si te perteneciesen. Ser fuerte es saber que cada uno se pertenece a sí mismo.»
«El mal es como una sombra: te sigue.»
«No había ninguna calabaza, ninguna canción espiritual capaz de recomponer un espíritu derrotado. Hasta la Estrella del Norte era un engaño.»
«Sé lo que estás pensando. Todos formamos parte de esto. Los asante, los fante, los ga. Los británicos, los holandeses y los americanos. Y no te equivocas. Nos enseñan a pensar así. Pero yo no quiero pensar así. Cuando se llevaron a mis hermanos y a los demás, mi aldea lloró la pérdida mientras redoblábamos nuestro potencial militar. ¿Qué significaba eso? ¿Que vengamos las vidas perdidas matando a más personas? Para mí eso no tiene sentido.»
«Él anhelaba ser un hombre sin nombre.»
«Su Ma nunca había sido como el resto de las madres. Era un poco rara, algo distraída, pues aún soñaba con el país del que la había arrancado tantos y tantos años antes. A menudo la veían mirando el agua como si pretendiese ir a tirarse de cabeza para buscar el camino de regreso a casa»
«El dios del hombre blanco es igual que el hombre blanco. Se cree que es el único dios, de la misma manera que el hombre blanco se cree que es el único hombre.»
«Por mucho miedo que le dieran los nuevos sonidos, era consciente de que necesitaba oírlos.»
«Cuéntame la historia de mi cicatriz. // ¿Cómo puedo contarte la historia de la cicatriz sin narrar primero la de mis sueños? ¿Y cómo hablar de mis sueños sin mencionar a mi familia? A nuestra familia.»
«Mi abuela decía que las personas que estaban atrapadas en el fondo del mar le hablaban. Nuestros antepasados. Estaba un poco loca. // No me parece ninguna locura. Joder, en la iglesia de mi abuela todo el mundo ha percibido algún espíritu en un momento u otro. Sólo porque alguien vea u oiga algo que los demás no ven ni oyen no significa que estén mal de la cabeza. Mi abuela decía: <Un ciego no nos llama locos por ser capaces de ver>.»
Joyce 